Lo que ví no fué mas que un susurro a plena luz, los sujetos clamaban a gritos que los susurros no se ven, pero yo lo ví con mis propios ojos, era triste, lento, un caracol quizás, es que el todo y nada me conmueve como si quisiera expulsarme al fin de mi misma, para ya no sentir placeres que adormecen el cuerpo, para no sentir el correr de mi sangre dentro de mis venas caducadas y disueltas...
Vueltas dan por mi cabeza las palabras descuartizadas que intentaban evadirme de vez en cuando, porque la noche se dormía en un letargo eterno, y mis manos, mis manos se encontraban en un requiém eterno de mariposas estancadas en la sien, mi sien y las sienes de aquellos que con recato han sabido guardar el sabor agridulce que trae consigo el perdón, el olor y los gritos...dije alguna vez que odio los gritos?, pues los odio, no los soporto, una enferma soy en realidad, y crónico es el dolor de las manecillas de las puertas que entreabiertas no están, tengo aire confuso en mi cabeza y sin querer se exilia por mis manos semi-cerradas, semi-abiertas en ocasiones...
Lo que ví no fué mas que un soplo que violó mis entrañas.
Serais ce possible alors ?
1 comentario:
lei tu blog por que la cindy me lo dijo , un saludo lo lei casi todo adios.
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