
Si a ustedes,
a ustedes les regalo este teatro sangrante del dolor,
los ojos podridos que caen en las avenidas principales,
les dedico los roces del alma que carcomen los pies,
a ustedes.
Si a ustedes les regalo estos trozos vivos de las penurias que atosigan el cráneo,
les dedico los rumores de la tumba,
los cuerpos vivos
las armas cortopunzantes y los cepillos de dientes desgastados,
les reclamo caramelos de limón,
les recomiendo ver películas de horror,
a ustedes,
a ustedes les entrego la vida misma,
el alcohol
el ácido
los hongos y los ojos de ellos, los mios y los tuyos,
regalo mi mal, mi bien y mi más o menos,
les dedico las sombras,
el sol
y los cigarrillos que se consumen en mi boca,
boca roja,
boca rota,
te regalo un discurso deforme y sangrante,
para esperar,
para opacar,
te regalo los fluídos de mis oídos para que los reprimas,
para que ya no duela,
y la feca que se pudre entre los dientes,
la desesperación
los gritos infernales de la noche (a medianoche)
y media luz,
a ustedes les regalo un trozo de mi,
un pedacito de carne viva,
y las ganas de morir en el intento,
a ustedes,
si,
la rutina sucia rutina, sagrada y aburrida,
les dedico los puñales de "Dios",
las balas de mis amigos,
los botellazos en la cabeza
y el amor que no existe,
les regalo un árbol, una semilla y un poco de agua
riegue su árbol, hagalo vivir,
yo por mi parte me regalo a usted,
si a usted que lee
y que de seguro no comprenderá tantas weas conchasumadres que escribo,
les dedico la depresión, pero no la represión,
yo les regalo un poco de libertad,
una línea blanca
y un suspiro de tanto recordar
le regalo también una frase de Lemebel : "Rico, rico, como le dijo el culo al pico",
les dedico las ansías y mis uñas mordidas,
les regalo mi mala racha,
mis trabajos esporadícos,
y las palabras en volá de aluciná,
les regalo el placer envuelto en un caja negra.
Y el adiós con tu cuerpo...